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martes, 21 de mayo de 2013


¡No puedo evitarlo!. Capítulo 3. Cherny´s idea.
Las payasadas

Cherny: Mario nos cuenta ahora sobre varios temas, lo payaso que es a veces, cuando empieza a tomar unas vitaminas para concentrarse... mejor os dejo con el. 


No sé si os he dicho que este año he empezado a dar clases particulares de mates y lengua. Mis padres me han dicho que necesito ayuda porque lo ha dicho la profe, bueno y porque he suspendido la primera evaluación (jeje). A mí no me apetece nada, y me enfado mucho cuando va a venir Marta, mi profe particular, aunque tengo que confesar que luego me olvido y si me porto bien vamos sumando puntos y al final me regala pegatinas, y cuando llevo muchos puntos mis padres me dan un premio. La verdad es que tengo que reconocer que tengo un don con la gente, porque a pesar de sacar un poco de quicio a las profes, luego me cogen muchísimo cariño y me llevo muy bien con ellas. Con mi profe de este año del cole me pasa la mismo, a veces se desespera conmigo y me pone notitas en la agenda, pero luego me la gano enseguida con mi sonrisa, mis payasadas y mi alegría. Hablando de payasadas, mis padres me han contado muchas veces una payasada que hice cuando iba a la guardería, con menos de 3 años, es mi preferida. Estábamos comiendo puré de verdura y yo cogí la cuchara llena de puré y la lancé al aire y se quedó pegada en el techo. Parece que se reían no solo mis compañeros de guarde, sino que las profes no podían evitar llorar de la risa, supongo que se les escapó porque no deberían haberse reído no?. Yo soy así, un poco payaso.


Hace unas semanas me llevaron a un médico y me estuvieron haciendo pruebas, me llenaron la cabeza de cosas pegajosas y asquerosas. Después de eso, me han empezado a dar unas “vitaminas” para que me concentre en clase. Oye y funcionan, en clase me entero mucho mejor de todo, no me castigan tanto y estoy super tranquilo. Incluso juego con mis hermanos sin molestarles.

Me gusta ver la tele, sobre todo pelis y dibujos chulos. Dicen mis padres que cuando era pequeño también me gustaban, pero que no conseguía ver nunca una peli entera, porque me ponía a jugar con los coches o a otras cosas, y de vez en cuando echaba un vistazo a la tele. Ahora ya soy más mayor y ya si lo veo todo, siempre y cuando mis hermanos me dejen, porque se ponen a jugar a mi lado y me molestan mucho. Y lo que más me gusta es el plan peli en familia con palomitas, ojo las palomitas son imprescindibles, sino no es lo mismo.

También me gusta quedar con mis amigos, ahora tengo más amigos, y sobre todo quedo con los de baloncesto. Uno de ellos, Quique vive al lado de mi casa, con lo que a veces voy a jugar a su casa o a veces viene él. También veo mucho a María que es la hija de unos amigos de mis padres. Muchos fines de semana vienen sus padres, sus hermanos y otros padres con sus hijos, que uno de ellos es amigo de Jaime y hacemos “merienda-cena” (así lo llaman ellos, yo no lo entiendo muy bien, porque no merendamos y cenamos juntos, solo comemos una vez) y jugamos todos juntos. María y yo somos los mayores, pero suelo ser yo el que organizo los juegos, la verdad es que a veces soy un poco mandón. Tu ponte ahí y tu ahí, y ahora nosotros tiramos la pelota. Sobre todo jugamos a cosas de pelotas y correr, es lo que más me gusta. Porque de los juegos tranquilos, el único que me gusta es jugar con legos. Mis padres me han dicho que un día que yo no estaba en una merienda-cena de este tipo porque me invitó un amigo a su casa, todos los niños incluyendo a mis hermanos, se aburrieron mucho sin mí. No sabían que hacer y estaban desorganizados, cada uno jugando a una cosa diferente en vez de jugar en grupo como cuando estoy yo organizando los juegos. Dicen que estaba todo muy silencioso sin mí, que faltaba ruido. 

Que guay, o sea que son imprescindible. Si es que soy la caña.

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