Sharing Ideas

jueves, 9 de mayo de 2013


¡No puedo evitarlo!. Capitulo 1. Idea de Cherny
La Familia


Cherny: este es el primer capitulo de una serie inspirada en hechos reales sobre un niño diagnosticado con Deficit de Atención y "un poco de Hiperactividad". Se aceptan comentarios sobre lo que opináis, ya que aunque a nadie le gusta etiquetar a los niños, lo que se podrá observar es que Mario "no puede evitar" hacer ciertas cosas. Espero que os guste. 




Me llamo Marío y tengo 9 años. Cuando tenía 6 años me diagnosticaron Déficit de Atención. La profesora lo tuvo muy claro cuando tardé 7 minutos en darme cuenta que todo el mundo estaba de pié rezando y yo seguía sentado haciendo las actividades, sin darme cuenta de lo que pasaba a mi alrededor.

Mis padres me han contado que cuando era pequeño no paraba de moverme, era muy inquieto y no dormía bien. Yo he sido siempre muy feliz y siempre he estado contento, y mis padres me dicen que era un niño muy gracioso. Me iba con cualquier persona, no era un niño que extrañara o que tuviera “mamitis o papitis”. De hecho a veces llamaba a mi madre y a mi padre mapi, mezclando los dos nombres. Me gustaba, y me sigue gustando, ser un poco payaso, y hacer el tonto para que los demás se rían conmigo. Aunque a veces no puedo evitar molestar más de la cuenta a los demás niños, sobre todo a mis hermanos.

Según mi madre soy muy “buen comercial”. Yo no entiendo muy bien lo que significa eso, pero mi madre me ha dicho que cuando quiero algo lo consigo a base de negociar para intentar cambiarlo por otra cosa, o a base de pedirlo incansablemente durante todos los días.  Dice que un día estando en el parque vi a un niño que tenía un coche que me encantaba. Estaba jugando con otro niño. Yo fui hacia ellos y les estuve explicando las ventajas que tenía mi reloj de plástico de piñata, y me creyeron tanto que conseguí que me dejaran el coche a cambio de turnarse para jugar con el reloj. La verdad es que tengo el mejor hermano para practicar las técnicas comerciales, ya que es muy difícil negociar con mi hermano Jaime, porque nunca quiere cambiar las cosas con las que está jugando.

A veces cuando nos vamos de viaje, (bueno tampoco hace falta irse de viaje para que esto suceda, puesto que en cualquier trayecto corto me pasa lo mismo), mis padres se enfadan conmigo por molestar a mis hermanos constantemente. Me muevo tanto, que meto sin querer el dedo en el ojo a mi hermano Jaime o atosigo a mi hermano pequeño Joaquín, con besos y más besos. Yo les intento explicar que es que no puedo evitarlo, que tengo que hacer algo con las manos. Luego me regañan y me pongo a llorar o me enfado y les llamo tontos. Yo no sé por qué me riñen, a mí no me parece que esté haciendo nada malo, nunca lo hago a propósito, pero no puedo evitar moverme. No puedo estar quieto durante tanto tiempo. Si me ponen alguna película que me gusta a lo mejor estoy un rato entretenido, pero tampoco demasiado. No me duermo ni de broma. También consigo entretenerme un rato si le hago preguntas que me inquietan a mi padre. Como por ejemplo, cual es el coche que corre más del mundo, o porque cuando me miro en el espejo las letras de la camiseta se ven al revés. Es que mi padre lo sabe todo, y siempre tiene repuestas a nuestras preguntas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Haz un comentario please